El estúpido revuelo organizado por feministas de, para mi gusto, medio pelo es decir falsas feministas, tras conocer que el nombre de Carmen Mola era un seudónimo tras el que se escondían ni más ni menos que tres hombres como tres casas, me ha hecho meditar acerca de la mentira y el pensamiento único, desgraciadamente imperante en nuestro país.
Y me quedo sorprendida al ver a toda esta gente
que utilizan la mentira, viven entre ella y de ella viven de hecho, indignados porque
estos tres autores han decidido utilizar el viejo sistema del seudónimo que
facilita la publicación de obras literarias sea quien sea su autor de forma
totalmente legal, y encima ser superventas.
A ver que es más interesante lo escrito que el
autor, y esto deberían asumirlo las propietarias (o propietarios?) de la
librería feminista que se ha molestado tanto que ha retirado todos los libros
de “la tal Mola”, y también se ha indignado mucho el presidente del Gremio de
Editores de Castilla y León……..
Y yo que pensaba que lo importante es lo
escrito y no el autor?????
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