Decepciones: la ecuación inversa de la felicidad

La decepción surge cuando no se cumplen las expectativas que teníamos sobre algo, que nos habíamos creado y creído sobre alguien o sobre, incluso, nosotros mismos, circunstancia que nos provoca sorpresa, tristeza y al fin frustración.

Un viejo dicho chino dice que para no decepcionarte lo mejor es no crearte expectativas, y dejar que pase lo que tenga que pasar…. Hombre así cualquiera.

Pero el caso es que yo me siento incapaz de no crearme expectativas hasta con la menor cosa, proyecto o persona (esto es muy español…) y mira que planifico hasta el último detalle…. pues nada que no paro de decepcionarme y sorprenderme constantemente (bueno no tanto) y con la menor cosa…

Por ejemplo vuelvo a casa descuelgo el teléfono fijo (naturalmente) y marco el 069: “El servicio contestador de movistar le informa de que no tiene mensajes” esto…. Y para que habré descolgado si total ahora todo lo que te tienen que decir te lo whatsaapean…. Esto me pasa por crearme falsas expectativas, no tengo más remedio que revisarlas…. (las expectativas digo….)