Los
viejos fantasmas del terrorismo de ETA que tanto nos atormentaron año tras año,
han vuelto a aparecer en forma esta vez de yihad, algo que podría parecer
lejano, algo que no tendría por qué ver con nosotros. Pero ahí está.
La
ciudad española de Barcelona ha sido la diana. Allí se encuentra una importante
población (la mayoría de ellos ya son segunda o tercera generación) procedente
de Marruecos. Y, como sucedió en otros países europeos, la probable falta de
integración de esos jóvenes seducidos y adoctrinados por los mensajes de
imanes, lanzados sin ningún control, en las Mezquitas europeas, ha
desencadenado esa guerra virulenta.
Falta
de control eficaz, sí: en la entrada al país, en las Mezquitas…. Y falta de
entendimiento entre las fuerzas autonómicas de seguridad y la Policía Nacional
y Guardia Civil .
Viñeta
del diario inglés Telegraph que ha inundado internet.
Así
que esas pancartas de “yo no tengo miedo” las pongo en duda. Con semejante
panorama ¿Quién no tiene miedo?.
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