El 8 de marzo, ese que dicen de la “mujer”,
antes trabajadora, sí, ese día que lo que se llama “izquierda” ha decidido que
es “suyo” y por tanto hacen con él lo que les plazca, mientras las ministras
socialistas llevaban guantes…. no por frío…. si no por miedo al contagio de
algo llamado “coronavirus”, algo que, hasta entonces, no nos sonaba nada, de
nada.
Y así fue, a pesar de todo el follón que estaba
montado con el “coronavirus” y su transmisión, la panda de estupendos políticos
que tenemos en las “alturas” decidió que aquí “na, no pasa na. To el mundo a la
mani… y venga de tocar y tocar el tambor”.
Y, bien, a pesar de que la asistencia fue
bastante menor que la de otros años (daba risa como la tele española no ponía
más que primeros planos…) fue lo suficientemente numerosa como para que, esa
misma noche, se diera “permiso” para que el personal se echara las manos a la cabeza….
y decir eso de que la cosa ya era una pandemia, al tiempo que (con toda razón)
se anunciaba ya el cierre de colegios, universidades, centros de trabajo,
residencias de ancianos, teatros, etc. etc.
Así que una vez “reivindicado” lo que creen
suyo, el Gobierno socialista de un tal Sánchez nos dio permiso para… temblar…
No hay comentarios:
Publicar un comentario