Me
temo que hay más diferencias de lo que aparentemente el simple léxico y la
etimología nos quieren hacer ver.
Jurar
es poner a Dios por testigo, es poner como testigo al Bien supremo, por eso se
realiza el acto de compromiso frente al crucifijo y con la mano derecha sobre
la Biblia pues se supone que, pese a ser un Estado aconfesional, pues
pertenecemos a una cultura obviamente cristiana, con lo que se supone que quien
habiendo jurado, miente está agrediendo a la propia verdad y ofendiendo a sus
propias creencias y a las de todos aquellos a los que representan.
Mientras
que prometer parece una fórmula más ligerita(¿?) más un compromiso consigo
mismo, como menos solemne y menos representativo… y si falla, es una ofensa
simplemente a la promesa, a la palabra dada a asimismo, se desliga de los
representados.
Y
no digamos quienes cambian la formula y la adaptan a su manera o anteponen eso
de “imperativo legal” , menos mal que ninguno lo ha dicho, claro que solo
faltaba……………
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